Cada vez la sociedad está más concienciada de ir hacia un modelo sostenible en todos los sentidos, sabiendo que, es importante comenzar por la vivienda de uno. Precisamente por este motivo, son muchas las personas que están intentando mejorar la eficiencia energética en sus hogares, teniendo en cuenta que, de ir hacia este modelo, son varias las deducciones fiscales que se pueden disfrutar.
Cada vez es más frecuente que las personas se preocupen por mejorar la eficiencia energética, sabiendo que, en un principio, este objetivo se lo plantearon las empresas y ahora, ha ido avanzando hasta el uso doméstico. Sí, en los hogares también se está intentando llegar a esa sostenibilidad tan deseada, sabiendo que existen diferentes métodos para hacerlo.
Hay que decir que apostar por la eficiencia energética en edificios o en una vivienda particular va a suponer un importante ahorro en las facturas, sin olvidar la reducción del consumo. Todo esto hace que el valor de la vivienda aumente en el mercado, fomentando el confort, la seguridad y la habitabilidad, a lo que se añade una disminución de la huella ambiental.
¿En qué consiste la eficiencia energética en edificios?
Cuando se habla de eficiencia energética en los edificios, se está haciendo referencia a un sistema que se basa en el uso racional de la energía para poder abastecer todas las necesidades que se presentan en un inmueble dentro de este terreno, tales como sistemas de calefacción, aire acondicionado o incluso agua caliente.
Todo esto de la eficiencia energética en las viviendas se basa en Passivhaus, o lo que es lo mismo, unos principales de edificaciones que se pusieron en marcha en Alemania hace más de dos décadas.
¿Quién se beneficia de todo esto?
Tal y como se ha comentado, el hecho de apostar por la sostenibilidad en las viviendas, conlleva a un gran número de ventajas. Entre otras cosas, hay que destacar por encima de todo, las deducciones fiscales para comunidades de propietarios o viviendas particulares, iniciativa que ha sido establecida por el gobierno, con el fin de “premiar” a aquellas personas que pretenden mejorar la eficiencia energética en sus hogares.
En esta nueva campaña de la renta, hay modificaciones en cuenta a deducciones y bonificaciones del IRPF y así se han dividido.
Calefacción y refrigeración
Para la reducción de la demanda de ambos sistemas, la deducción será del 20%, con un límite anual de 5.000 euros. Eso sí, para beneficiarse de esto, las obras deben ayudar a que se reduzca el consumo en, al menos, el 7%.
Energía primaria no renovable
En este caso es una mejora en el consumo de este tipo de energía, así, en esta ocasión, la deducción es del 40%, con límite anual de 7.500 euros. Aquí se establece que las obras deben reducir la energía primaria no renovable en un 30% como mínimo.
Rehabilitación energética
En el caso de que se lleven a cabo obras de rehabilitación energética de edificios, lo primero que hay que tener en cuenta es que estos deben ser de uso residencial, pudiendo contar con una deducción del 60%, siendo el límite anual de 5.000 euros.
Sistemas que mejoran la eficiencia energética en las viviendas
Como se ha mencionado anteriormente, en la actualidad existen numerosos sistemas que se pueden instalar en las viviendas para mejorar la eficiencia energética de las mismas. Si bien, hay algunos que son los más utilizados y que facilitan notablemente el ahorro sostenible.
Aerotermia
Se trata de un sistema de climatización muy eficiente. Un sistema de gran flexibilidad que utiliza tecnología limpia para su funcionamiento, sabiendo que se adapta a otros sistemas como las placas solares o las calderas de condensación.
Sistemas solares
Tal y como su nombre indica, son sistemas que hacen uso de la energía del sol para su correcto funcionamiento. Sin duda, son considerados los sistemas más eficientes del mercado, ya que mejoran el rendimiento y ayudan a tener un mayor ahorro energético. De hecho, la mayoría de usuarios que lo utilizan aseguran que el ahorro de las facturas ha sido, mínimo, del 30%.