Para mantener la mente y el cuerpo en buen estado, de vez en cuando es necesario parar, relajarse, reconectar. Existen muchas alternativas para ello, y una de las más interesantes en la actualidad es la de los masajes orientales, técnicas que han servido durante centenares de años como una forma de medicina y de curación en muchas naciones del continente asiático.
Los masajes orientales son técnicas milenarias que se basan en las medicinas tradicionales de diferentes países de Asia, como China, India, Tailandia y Japón. Estos masajes tienen como objetivo restablecer el equilibrio energético del cuerpo y la mente, favorecer la eliminación de las toxinas, relajar los músculos, aliviar los dolores y mejorar el aspecto de la piel. Además, los masajes orientales aportan beneficios a nivel mental y emocional, como reducir el estrés, aumentar la autoestima, promover el bienestar y la armonía.
Actualmente, no es necesario emprender grandes viajes en busca de la curación, sino que directamente se pueden encontrar masajes orientales en Madrid, realizados por profesionales específicamente formados en estas técnicas, por lo que para aprovechar todos sus beneficios bastará, a veces, con hacer una reservación y llegar puntualmente a la cita.
¿Por qué vale la pena un masaje oriental?
Existen muchos tipos de masajes orientales, cada uno con sus características y beneficios específicos. Algunos de los más conocidos son:
- Shiatsu: Es un masaje japonés que se realiza presionando con los dedos, las manos y los codos sobre puntos específicos del cuerpo, llamados meridianos, por donde circula la energía vital. El shiatsu ayuda a mejorar el funcionamiento de los órganos internos, a equilibrar el sistema nervioso y a prevenir enfermedades.
- Masaje balinés: Es un masaje originario de Indonesia que combina técnicas de estiramiento, acupresión, reflexología y aromaterapia. El masaje balinés relaja los músculos, mejora la circulación sanguínea, elimina las tensiones y estimula los sentidos.
- Masaje ayurvédico: Es un masaje hindú que se basa en el sistema médico ayurveda, que considera que cada persona tiene una constitución única formada por tres bioenergías: vata, pitta y kapha. Los masajes ayurvédicos pretenden equilibrar estas tres bioenergías para restablecer la armonía entre cuerpo y mente, y combatir la aparición de cualquier perturbación derivada del desequilibrio de las energías antes mencionadas.
- Masaje hawaiano: Es un masaje originario de Hawái que se realiza con aceites esenciales y con diferentes partes del cuerpo del terapeuta, como las manos, los antebrazos e incluso los pies. El masaje hawaiano tiene un efecto terapéutico y espiritual, ya que busca conectar con la esencia del ser y liberar las emociones bloqueadas.
Consejos para elegir el lugar donde hacerse un masaje oriental
Para disfrutar al máximo de los beneficios de un masaje oriental, es importante elegir un lugar adecuado donde realizarlo. Algunos consejos para ello son:
- Buscar un centro especializado en masajes orientales, que cuente con personal cualificado y con experiencia en estas técnicas.
- Asegurarse de que el centro cumple con las normas de higiene y seguridad necesarias para garantizar una buena atención al cliente.
- Elegir el tipo de masaje oriental que más se adapte a las necesidades y preferencias de cada uno, teniendo en cuenta el objetivo que se busca conseguir con el masaje (relajar, tonificar, desintoxicar, etc.).
- Consultar al terapeuta sobre las contraindicaciones o precauciones que se deben tener en cuenta antes de recibir un masaje oriental, como por ejemplo si se tiene alguna lesión, alergia o enfermedad crónica.
- Disfrutar del masaje con una actitud abierta y receptiva, dejándose llevar por las sensaciones y los beneficios que ofrece.
Son muchas las situaciones de la vida cotidiana por las que las personas deben detenerse, pensar en la relajación y en un masaje oriental como una forma de reconectar y de blindar al cuerpo, motivándolo a encontrar nuevas energías para seguir adelante. Saber que es posible realizar esta clase de terapias milenarias en ciudades como Madrid, es un beneficio adicional a los que ya aportan dichos masajes.