Ángel Hernández fue detenido en Madrid acusado de homicidio después de haber ayudado a su esposa en estado terminal a poner fin a su vida.
Ha reavivado el debate sobre la eutanasia en España y ha tomado por asalto la campaña electoral antes de la votación del 28 de abril.
Hernández pasó la noche en una comisaría de policía, pero fue puesto en libertad una vez que dio su declaración ante el tribunal al día siguiente.
Su esposa, María José Carrasco, fue diagnosticada con esclerosis múltiple cuando tenía sólo 31 años. Durante treinta años, su marido ha estado a su lado, cuidando a esta mujer de 61 años hasta el final.
Ahora está siendo investigado por colaborar con un suicidio y un posible cargo de violencia de género.
El hombre de 69 años contó a Euronews los últimos minutos que pasó con su esposa y el día en que la ayudó a morir con una dosis letal de pentobarbital sódico.
«Esperamos media hora», dijo Ángel. «Ella estaba tan callada. Tenía los líquidos allí, y tenía agua, y la sustancia.
«Le pregunté, ¿quieres hacerlo? Ella dijo que sí. Luego le ofrecí el vaso. Le di unas gotas para los ojos. Dijo: «Mis ojos están llorando». La acaricié y me despedí de ella.»
Ángel se filmó a sí mismo ofreciéndole a su esposa un vaso con la droga como prueba de su consentimiento.
«Sabía que podía enfrentarme a la cárcel», dijo. «Esto es lo que asumí. Lo que me preocupa más es que me retraten como una persona violenta por motivos de género en lugar de cuántos años puedo pasar en la cárcel.
«Pero esto de desviar el tema y ahora es violencia de género… Hablemos de la eutanasia, eso es lo importante.
«Alguien dijo una vez que lo que no está escrito, no existe. Es lo mismo. Lo que no está en la cámara, lo que no se puede probar con una imagen, es como si nunca hubiera ocurrido. Esto es lo que los negadores han estado usando para ignorar el problema. Bueno, mira, existe. Le pasa a mucha gente, en España y en todo el mundo».
Las elecciones en España podrían ser una oportunidad para aquellos que quieran decidir cómo acabar con sus vidas. La decisión final está en manos de los diputados elegidos a finales de este mes.
