Los procesos de separación y divorcio de una pareja siempre son complejos y dolorosos para todas las partes involucradas, y mucho más, cuando hay hijos en común. Es por ello que ante ese tipo de situaciones, resulta esencial contar con los mejores abogados del área, para abordar el problema de forma rápida y efectiva, aspectos claves para que cada uno de los miembros de la ahora expareja, pueda continuar con su vida y sanar las heridas.
De ahí que, al momento de seleccionar abogados de separaciones en Madrid, resulte sumamente importante optar por profesionales altamente cualificados para esa tarea y que cuenten con una amplia trayectoria, porque de ello dependerá la rápida resolución del caso. Si bien los términos del divorcio dependen, básicamente, de la pareja, es un hecho que un buen abogado puede marcar una gran diferencia en el proceso y resultado final.
¿Por qué contratar un abogado especialista?
Un error común que suelen cometer muchas personas cuando se enfrentan a un proceso de separación o de divorcio, es contratar o pedir apoyo a abogados conocidos, generalmente amigos o familiares, aun cuando no sea el área de especialización de los mismos. Este tipo de situaciones suele darse ante la creencia de que, al tratarse de un conocido, el coste será mucho más barato, pero lo cierto es que a la larga, el procedimiento suele ser más costoso, tanto a nivel económico como emocional.
Al igual que en cualquier otra profesión, la especialización es clave para obtener los mejores resultados posibles, y en el caso de una situación de divorcio, no es la excepción. Un profesional especializado y con amplia trayectoria es la mejor garantía con la que podemos contar para que el proceso se desarrolle de la forma más amigable y con los mejores resultados para las dos partes involucradas.
Los abogados especialistas en divorcios conocen a la perfección todas las leyes relacionadas y son los profesionales más indicados para asesorar a sus clientes en función de cada situación o escenario. Contar con un verdadero profesional reducirá las probabilidades de terminar en un proceso contencioso, y en caso de hacerlo, es clave para que el resultado sea favorecedor para su cliente.
Principales tipos de divorcio
Definitivamente, contar con un abogado especialista en divorcios es clave para que la situación se pueda solventar en el menor tiempo posible, lo que se traducirá en un menor coste económico y emocional. Además, como comentamos anteriormente, se reducirán las probabilidades de terminar en un tipo de divorcio contencioso, el menos recomendable.
A continuación compartimos las características más destacadas de los principales tipos de divorcios:
- Divorcio express: este tipo de divorcio es una magnífica opción para parejas que no tengan hijos en común, porque les permite finiquitar el matrimonio en cuestión de 48 a 72 horas hábiles. Además, la pareja puede contratar los servicios del mismo abogado, para abaratar los costes.
- Divorcio de mutuo acuerdo: el divorcio de mutuo acuerdo también es una gran opción, tanto para parejas con hijos como para parejas sin hijos. En este tipo de divorcios se redacta un convenio regulador, donde se especifican todos los detalles con respecto a bienes, hijos, pensiones y demás aspectos claves. Al igual que en el divorcio express, en el divorcio contencioso también es posible contratar los servicios del mismo abogado, con todas las ventajas económicas que ello implica.
- Divorcio contencioso: como comentamos anteriormente, el divorcio contencioso es el menos recomendable, sin embargo, es la última alternativa disponible para aquellas parejas que no logran acuerdos sobre aspectos tan importantes como los hijos o los bienes. En este caso, cada miembro de la pareja deberá contratar los servicios de un abogado de forma independiente y será un juez el encargado de tomar las decisiones. En este caso, además, el tiempo de resolución puede extenderse durante muchos más meses.
El divorcio es, sin lugar a dudas, un proceso sumamente doloroso y complejo. Pero contar con un buen profesional es un factor clave para cerrar el caso lo más rápido posible, y lograr así, que cada miembro de la pareja pueda seguir su vida con absoluta tranquilidad.