Con el envejecimiento aparecen diversas dolencias y también se comienzan a experimentar problemas de memoria. Pero este no es un problema que solamente se asocia a la tercera edad, otras edades tienen probabilidades de experimentar los síntomas de esta condición. Son varios los aspectos que hay que tener en cuenta, entre ellos están los hábitos y el estilo de vida.
¿Cuáles son sus causas más comunes?
Generalmente, la perdida de memoria siempre se relaciona con el Alzheimer. Esta enfermedad neurodegenerativa comparte características con otras patologías que indican el avanzado deterioro del órgano cerebral. Cada uno de ellos responde a distintas causas.
A lo primero que hay que prestar atención es a los cambios bioquímicos del cerebro, los cuales pueden ser resultado de que el paciente continuamente esté expuesto a situaciones que le provocan estrés y ansiedad. Por ejemplo, un estado depresivo avanzado ocasiona bajos niveles de serotonina. También la pérdida de memoria puede ser resultado de un déficit grave de vitamina B1.
Por otra parte, se debe tener en cuenta que en ciertos casos se trata de un efecto secundario provocado por la administración de ciertos medicamentos. Esto puede ser resultado de un error en la dosis, que en la mayoría de los casos es por exceso de las mismas.
Investigaciones médicas y científicas, igualmente han demostrado que la condición de deterioro de la memoria puede deberse a sufrir alguna patología. Por otro lado, no solo está relacionada estrechamente con la edad avanzada, sino también con la calidad de vida. Asimismo, la capacidad de aprendizaje y cómo se haya entrenado el cerebro durante varios años pueden ser determinantes.
¿Cuáles son los síntomas de la pérdida de memoria en personas mayores?
El principal síntoma de esta condición en ancianos es que pierden con frecuencia sus objetos personales. Esto puede ser más notable en aquellos individuos que usualmente no experimentan este tipo de problemas en su cotidianidad. Igualmente, pueden sentir confusión al no recordar cuáles son las tareas que realizaron durante el día.
Además, es usual que estas personas comiencen a repetir continuamente las mismas preguntas o historias. Incluso, su discurso es confuso porque suelen presentar dificultades para encontrar las palabras exactas que les permitan expresarse. Esto puede repercutir en su capacidad para tomar decisiones y seguir instrucciones.
A veces la persona no sabe qué día o fecha es. Tampoco el año. Por consiguiente, olvidarán eventos y reuniones que previamente habían pautado.
Cuidado de personas mayores con pérdida de memoria
Es importante que con la pérdida de memoria se tenga un plan de cuidado que debe implementarse de forma inmediata. Por ello, se recomienda contar con ayuda médica profesional. Los servicios como el que presta Beeping son una excelente alternativa, porque directamente se pueden contactar especialistas certificados y acreditados. Ellos pueden ofrecer una completa asesoría sobre este tema.
Lamentablemente, los problemas de memoria se pueden acelerar si no se tratan a tiempo. Además, las personas mayores necesitan recibir atención continua. Por ello, se recomienda que en estos casos se decida por un servicio de asistencia en casa. De esta manera, el cuidador de la persona mayor podrá poner en práctica ejercicios que los estimule mentalmente como entrenamiento. Asimismo, es importante evitar que estas personas pasen mucho tiempo solas.
Con un cuidador a domicilio se garantiza que de forma efectiva los pacientes aprendan hábitos y rutinas saludables. Eventualmente, se observan cambios favorables en su memoria, como se puede demostrar en la mayoría de los casos. En los casos de mayor gravedas, suele ser imperativa la asistencia hospitalaria. Esta es una decisión que va a depender del médico tratante que debe evaluar el alcance de la enfermedad.
La efectividad de este tipo de tratamiento siempre va a depender de la constancia y de la dedicación. Es por ello que se considera la asistencia doméstica, ya que es una alternativa con la cual se mantiene una vigilancia constante sobre el avance de la enfermedad.
